La Policía Foral ha investigado a tres conductores esta semana por distintos delitos de tráfico y contra la seguridad vial. En uno de los casos, ha imputado un delito de conducción bajo la influencia del alcohol a un taxista que fue interceptado al triplicar la tasa de alcohol en Ansoáin. Según ha dado a conocer la Policía Foral, este conductor avisó previamente al cuerpo policial de que no encontraba su vehículo y que creía que podía haber sufrido el robo del mismo, hasta que después fue finalmente interceptado cuando conducía ebrio.

Sin puntos, positivo en drogas y con tres cuchillos en Alsasua

Además, otro conductor fue investigado por circular con pérdida de vigencia por carencia de puntos en Altsasu. Fue una patrulla la que comprobó con la matrícula de un vehículo que el titular carecía del permiso. Fue también denunciado por positivo en anfetaminas, posesión de marihuana y portar tres cuchillos de grandes dimensiones.

En último lugar, se imputó a otro conductor en Pamplona por no haber obtenido nunca el permiso. Los agentes controlaron un vehículo que no se detuvo en un semáforo en rojo. Al identificar al conductor reconoció no haber estado nunca en posesión del permiso de conducir, ni aquí ni en su país de origen, argumentando que era conocedor del delito pero que la conductora habitual no podía hacerlo debido a su estado de embriaguez.